Por lo general, las hernias afectan a la columna lumbar (en la parte baja de la espalda), y a la parte cervical de la columna, y también puede llegar a afectar la parte central de la espalda, pero estos casos son más raros.
Una hernia discal puede ocasionar fuertes dolores de espalda, sensación de adormecimiento, y hormigueo en las extremidades, ya que se trata de una dolencia que se presenta en los discos cartilaginosos que componen las uniones entre vértebras de la columna vertebral.
Desde Fisioalmat apostamos por la salud de cada paciente, y por eso tomamos en cuenta la importancia de considerar este tipo de problemas físicos.
POSIBLES CAUSAS DE UNA HERNIA DISCAL
Cada persona tendrá un tipo de hernia, o estará más predispuesta a padecerlas, pero en todos los casos, la intervención de un fisioterapeuta con experiencia, podrá aliviar los dolores que éstas produzcan, y prevenir en cierta manera que se compliquen con el paso del tiempo.
- Una de las causas más comunes es mantener una mala postura de forma frecuente, ya que el cuerpo se acostumbran a estar en esa mala posición y cuando la persona quiere corregir la postura, llega a forzar mucho los huesos y las articulaciones, y le ocasionará dolor.
- Del mismo modo, hacer un esfuerzo de malas maneras y levantar mucho peso también puede llegar a causar una hernia discal. En este sentido, existen posturas que se deben adoptar de forma previa a realizar movimientos con peso o antinaturales, doblando un poco las rodillas para conseguir un buen equilibrio y evitar que la columna sufra.
- Asimismo, la pérdida de flexibilidad y elasticidad puede llevar a que se forme una hernia de disco. Por esto, es de vital importancia que el paciente haga ejercicios con frecuencia para que la columna se fortalezca y permanezca en buen estado. Ponerse en manos de tu fisioterapeuta de confianza también será un acierto en estos casos.
¿LAS HERNIAS DISCALES PRESENTAN SINTOMAS?
La respuesta a esta pregunta es si. Es importante señalar que en ciertos casos, las molestias provocadas por las hernias no aparecen solo en la espalda, también puede causar sensación de adormecimiento en los glúteos, dificultad para mover el cuello y para alzar los brazos, sensación de debilidad u hormigueo en los brazos y en las manos, y sensación de ardor en los pies.
Aunque también hay casos en los que los síntomas no son muy evidentes y pueden pasar desapercibidos. Sin embargo, a medida que se va esforzando la espalda para realizar movimientos, los síntomas pueden volverse cada vez más evidentes.
Ante cualquier signo o evidencia de que puedas padecer una hernia discal, puedes consultarnos para tomar la decisión más adecuada cuanto antes.
COMO ALIVIAR LOS SINTOMAS DE UNA HERNIA DISCAL
Una vez diagnosticada la hernia discal, es importante que el paciente considere su situación, y se comprometa en su mejora, y esto también implica la intervención de la fisioterapia, para paliar síntomas, aliviar dolores, y avanzar en la recuperación paulatina de la espalda.
Los dolores se podrán hacer más llevaderos tomando algún antiinflamatorio o analgésico, y sin ninguna duda, será importante contar con Fisioalmat, donde fisioterapeutas experimentados pondrán en marcha técnicas de fisioterapia que se adapten a las necesidades de cada paciente (estiramientos, calor, pautas de ejercicios, etc.).
En ocasiones, según el tipo de hernia que tenga el paciente se pueden utilizar técnicas de osteopatía, para movilizar determinadas partes de la columna que de otra forma resultaría imposible, y esto también forma parte de las funciones de Fisioalmat, porque tenemos personal especializado en osteopatía.
Cuando una hernia discal se encuentra en proceso de mejora, es fácil que el paciente se sienta mucho mejor y perciba su vida con mayor calidad, por lo que se concluye que la fisioterapia es fundamental en este tipo de procesos de dolor y desgaste de la columna vertebral.